viernes, 22 de octubre de 2010

Sento la mancanza di...

Ayer, volviendo de hacer la compra, atravesábamos Piazza Dante y en el cielo vi la luna. No pude evitar abstraerme por un momento e ignorar lo que Ragel me estaba contando mientras regresábamos a casa. Fueron unos segundos que me hicieron recordar las noches en mi aldea, cuando miraba al cielo y veía la luna rodeada por un halo de luz y pensaba, ingenuo como siempre, esta noche va a nevar. Un dato inverosímil sacado de una película seguramente que provoca un cosquilleo en mi interior cuando veo la luna en ese estado, ya sea invierno o verano.
La cuestión es que después de esta visión fui consciente de que ya no estoy en casa y de lo mucho que echo de menos estar allí. Hoy, viernes, podría estar preparando un fin de semana en compañía de mis amigos, organizando la fiesta de la próxima semana o haciendo la maleta para pasar los dos próximos días en casa de mis tíos jugando al ordenador con mi hermano y mi primo. Ayer Carmen me recordaba que yo soy el menos apegado a la familia de cuantos ha conocido en Santiago y es cierto, a medias, porque los últimos años seguramente fui uno de los que menos ha bajado los fines de semana a casa, pero sí estoy apegado a ellos. De hecho algunas veces estoy tan necesitado de ellos que necesito saturarme de la vida familiar con unos días dedicados absolutamente a ellos.
Aquí me siento como en mi primer año de carrera, cuando todos los fines de semana quería volver a casa para ver a mis amigos y a mi familia. Pero me consuela recordar que en aquel primer año, que ahora recuerdo tan lejano, conocí a un montón de gente que quiero y que me aportaron, en cierta medida, ese calor familiar que extrañaba y por el que cogía un tren todos los viernes.
Quizá todo esto que escribo sea producto de un viernes por la mañana sin clase o quizá porque mis compañeros de piso se preparan para irse a sus casas el fin de semana. Quizá estoy tan sentimental porque hoy es mi primer mesiversario en Nápoles y nadie me ha felicitado.

martes, 19 de octubre de 2010

En busca de la casa soñada

Buscar casa es un trabajo arduo pero más aun si tienes que buscar un hogar en un país donde no hablan tu idioma o dónde no conoces las calles. Cuando llegamos a Nápoles cogimos un taxi que nos llevó al albergue y una vez instalados comenzó nuestra búsqueda.
Si tienes la suerte de pertenecer a la universidad Federico II lo que tienes que hacer es dirigirte al Erasmus Point, que se encargará de enseñarte todos los pisos que quieras ver hasta que encuentres el que más te guste. Pero si, como nosotros, tienes que estudiar en la Seconda, debes ampliar tus horizontes. Puedes empezar buscando en internet en la página www.easystanza.it, aunque si no pagas una cuota de poco sirve este sitio porque no puedes responder a los mensajes. Esta web es buena solamente cuando la persona que busca inquilino pone su numero de telefono en el anuncio. En este caso lo que hemos hecho nosotros ha sido descargarnos un programa de internet que te permite llamar a números fijos y móviles de todo el mundo por poquísimo dinero, por no decir gratis. Cuando te lo descargas debes hacer una recarga de 10 euros pero llamar a los fijos es gratis, y a los móviles cuesta unos pocos céntimos por minuto. El nombre del programa es ... (debo preguntar)
Otra opción, y las más recurrida por nosotros, es recorrer las calles en busca de anuncios en las paredes. Anche para esta opción es necesario tener este programa de llamadas o haber comprado ya un móvil de una compañía italiana, sino la factura de tu celular español se verá muy incrementada a final de mes.
También puedes comprar en un kiosko un "porta portese", como por ejemplo el Brik&Brak, donde encuentras anuncios de apartamentos o habitaciones en alquiler. Esta opción también requiere el programa para llamar gratis.
Pero buscar piso tiene una ventaja y es que no hay mejor manera de conocer una ciudad que recorriendo las calles y metiendote dónde no deberías. Cuando ya has visto varios pisos horribles tus esperanzas comienzan a evaporarse y piensas que el próximo piso con las mínimas necesidades para vivir será tuyo cueste lo que cueste. Pero de repente aparece el piso de tus sueños, y como en todos los sueños, despiertas cuando te dicen que alquilar una habitación cuesta 500 euros. Al final te conformas con un piso "residencia" compartido con otras 6 personas, donde la casera se hace de oro gracias a 7 alquileres mensuales. La verdad es que estoy muy contento con mi residencia porque todos hablan italiano, incluso la chica china, y esto me obliga a hablar italiano con ellos.
La proxima actualización se la dedico a mi casa. Colgaré fotos para que podais verla.

A presto ;p

miércoles, 13 de octubre de 2010

Fotos de Parco Virgiliano

Haciendo el tonto delante de los baños, que al igual que los baños españoles estaban llenos de anuncios indecentes.

En uno de los miradores del parque. La chica de la izquierda es una de mis compañeras de piso, Emily (Li Xao Ning creo que se llama en chino)

Isola di Nisida creo que se llama

No tiene mucha ciencia esta foto. Es el panorama desde un mirador.

Pasando la tarde con Ana (la andaluza que estudia medicina) y Gabrielle (que estuvo de Erasmus el año pasado en Santiago)

martes, 12 de octubre de 2010

Parco Virgiliano, el Bonaval napolitano

Bonaval es un parque situado en la ciudad de Santiago de Compostela al que suelen ir con frecuencia la gente para charlar con sus amigos, dormir, tomar el sol, leer, componer, jugar un partido de fútbol... Hemos encontrado su equivalente napolitano, se llama Parco Virgiliano. Sus vistas no tienen nada que envidiar al panorama de la catedral en el parque gallego. En sus miradores puedes disfrutar del mar en todo su esplendor, con las islas mas famosas de la ciudad.
Allá nos dirigimos el pasado domingo, para pasar el día tirados únicamente charlando y vagueando. LLeno de turistas y familias que escapan de la rutina en el séptimo día, además de los jóvenes que escapan de sus familias para liberarse fumando una canna o jugando a las cartas. Nosotros éramos 13, mal número si no crece, así que creció. Después de comer se unieron 3 más. Y con un picnic, unas chiacheres y juegos malabares pasamos el día, hasta que la noche comenzaba su aparición y el frío nos calaba los huesos.
Pero todo lo bueno tiene un contra, y la desventaja de este magnífico lugar es la distancia. En el trayecto de ida hicimos 45 minutos a pie hasta Piazza Vittoria (por el paseo marítimo), media hora de autobús (el 140 hacia Posillipo con parada en Marechiaro) y para terminar otra media hora caminando con vistas al mar. En realidad merece la pena el largo trayecto. Pero cuando volviamos para casa descubrimos que si cogemos el C21 y el metro el trayecto es más corto. Tendré que investigar más sobre esto.

En cuanto me pase Carmen las fotos subiré algunas para que veais lo bonito que es. Aunque creo que hay algunas ya subidas al facebook, pero están un poco borrosas.

A presto ;p

miércoles, 6 de octubre de 2010

Un dia de playa

Hoy una actualizacion rapidita. Para coger el autobus tienes que comprar en un estanco el billete que luego ticaras en una maquina una vez subas al autobus. Puedes coger el billete de un solo viaje (biglieto per l'autobus unico napoli) que puedes usar durante 90 minutos despues de ticarlo por 1.10 euros; o puedes coger el giornaliero que es para todo el dia y todos los medios de transporte por 3.30 euros.

¿Y por que hemos cogido el autobus? Pues porque a nuestra nueva querida amiga andaluza (Ana) se le ha dao por querer ir a la playa. Y alla nos fuimos con ella, media hora andando, mas otra media en autobus y lo mismo andando de nuevo. Las vistas muy bonitas pero las playas no son a lo que estamos acostumbrados en España. La arena (muchas ni tienen) esta llena de basura y cristales y el agua suele estar bastante sucia porque, en su mayoria, la costa es puerto pesquero. Aun asi nos metimos en el agua, que estaba muy buena, a dia 4 de octubre, algo que nunca habia hecho en España. La playa se llama "Spiagia Gaiola" y la parada del autobus es Marechiaro.

Ci vediamo!

P.D.: no se si llegare a casa sabiendo hablar italiano, pero como sigamos asi llegaremos con acento andaluz pa dar y tomar. Parece mentira que seamos 3 gallegos y una andaluza.
Y como dato informativo, en Andalucia se dice "que perra eres" cuando nosotros decimos "que vaga eres"